La exposición “Les Fleurs d'Yves Saint Laurent” (Las flores de Yves Saint Laurent) abrió recientemente en París, compuesta por una selección de trajes de alta costura concebidos por el célebre diseñador de modas, que comparten espacio con obras del artistas estadounidense Sam Falls y fragmentos de Marcel Proust.

Desde piezas concebidas en sus inicios como asistente de Christian Dior, y por tanto vestidos con los lirios del valle que le encantaban al creador normando, hasta diseños inspirados en las buganvillas que le fascinaron en su largo romance con Marruecos, la exposición comprende un frondoso bouquet confeccionado en telas y bordados.

A lo largo de la exposición, los visitantes descubrirán las piezas icónicas y las habilidades que Yves Saint Laurent utilizó para dar vida a sus creaciones florales: los primeros apliques bordados del vestido primavera-verano 1962, y el virtuosismo de los estampados de la colección primavera-verano 2001, una referencia a las pinturas de Pierre Bonnard. Majestuosas son las flores de seda gazar de la novia de verano encarnada por Laetitia Casta en 1999, un momento que permanece inolvidable en la historia reciente de la moda.

Cada sala del museo se ha dispuesto como el capítulo de un libro, subrayando una temática en particular. Para reforzar el concepto editorial, se reproducen fragmentos de la célebre obra “En busca del tiempo perdido”, de Proust, de la que el mismo Saint Laurent comentó en vida que desde los 15 años no dejó de releer.
Un acento relevante de la muestra es la obra de Sam Falls, que viaja por el mundo recogiendo plantas y conservando la memoria de paisajes florales imprimiendo los pigmentos directamente sobre lienzo.
La muestra instalada en el Museo Yves Saint Laurent de la avenida Marceau de París, donde por muchos años tuvo sus talleres el diseñador, estará abierta hasta el 4 de mayo de 2025.