Gracias a la generosidad de muchas personas e instituciones, Cáritas Valencia, pudo llevar alegría en esta temporada de Navidad, a los niños de la comunidad de Los Naranjos, ubicada en la parroquia Negro Primero de Valencia.
El padre Carlos Torreiro, director general de Cáritas Valencia, en compañía de su equipo de voluntarios, se trasladó a la iglesia San José de Los Naranjos, y fueron recibidos con una calurosa bienvenida encabezada por el padre Mario Rivas y familias de esa popular comunidad.
Inicialmente se hizo una Misa de Aguinaldos y luego la alegría se desbordó con la entrega de juguetes, meriendas y golosinas, en los jardines de la casa parroquial. Unos 120 niños recibieron regalos.

El padre Torreiro agradeció a las personas e instituciones que permitieron que esa actividad fuera posible, porque se benefició a los habitantes de la única zona rural que tiene Valencia, donde viven personas de escasos recursos, pero amables y trabajadoras.
“Navidad nos recuerda que el Padre Celestial toma la iniciativa, al darnos como un don, un regalo, a su hijo Jesucristo. Por eso los hombres de buena voluntad también somos generosos con nuestros hermanos, especialmente los más necesitados”.