Más allá de la denunciada falta de garantías democráticas para las votaciones que el Consejo Nacional Electoral (CNE) fijó para el domingo 25 de mayo, la diatriba por dicho proceso parece concentrarse en los severos señalamientos entre quienes postulan candidaturas y llaman a votar y quienes no avalan nuevos comicios hasta que no entre en vigor la voluntad popular del 28 de julio, a favor de Edmundo Gonzalez Urrutia.
Analistas políticos coinciden en que quienes promueven la participación a pesar de la precariedad de las condiciones electorales, enfrentan un importante descrédito por la magnitud del fraude electoral cometido en las presidenciales, pero también por la última sentencia de la líder opositora, María Corina Machado en la que acusó “traición”, por el importante apoyo popular que todavía ostenta.
“Calificativos tan fuertes por parte de quien detenta el mayor referente político dentro de la oposición supone una ruptura definitiva de lo que hasta ayer podría catalogarse como coalición. Ese señalamiento también marca una herida muy difícil de cerrar, además de hacer irreconciliables las posiciones de uno y otro lado, pues cómo harás en el futuro para aliarte con traidores o con quien te señaló como tal”, expresó el consultor político Luis Medina Gil.
“Golpe mortal”
Durante una reciente entrevista, la ganadora de las primarias opositoras de 2023, convertida luego en la gran electora del 28 de julio, advirtió sobre los factores políticos que inscribieron candidatos que es “imperdonable” promover o convocar a la “rendición” y a la “entrega” frente a Miraflores y dijo estar segura que el pueblo venezolano nuevamente les propinara una derrota a ambos sectores, esta vez, no acudiendo, afirmó, a una farsa electoral.
“Lo que más me ha dolido han sido los amigos, los compañeros que he perdido porque traicionaron la causa, porque por un motivo u otro, se rindieron o se entregaron”, dijo a la periodista venezolana Carla Angola.
A juicio del también consultor político, Luis Peche Arteaga, la falta de apoyo tanto de Machado como de Edmundo González en estos momentos es un “golpe mortal” a las candidaturas de Un Nuevo Tiempo (UNT) y Unión y Cambio que se han conocido en los últimos días. La candidatura de Henrique Capriles Radonski, habilitado y con tarjeta nueva, como primero de la lista nacional al Parlamento, es quizás la más polémica.
Indicó que esta posición de Machado que se suma a la falta de garantías políticas y electorales del proceso que organiza el CNE, abonará a la importante abstención electoral que se espera para el 25 de mayo.
“El hecho de que el principal liderazgo, validado por las primarias de octubre de 2023 y las elecciones presidenciales del 28 de julio, se pronuncie en rechazo, termina siendo bastante mortal, tomando en cuenta que Capriles se retiró de las primarias. El calificativo de traidores es tan pesado, tan contundente y tan fuerte, digamos que marca mucho una ruptura a lo interno de la oposición, por lo menos en esta coyuntura y una condena para las candidaturas que tendrán que correr con este plomo en el ala”, sostuvo Peche Arteaga.
Gobierno logra dividir
Este 25 de abril, circuló de manera extraoficial una comunicación interno de la Plataforma Unitaria Democrática en la que se confirmaria la exclusión de dicha instancia, tanto de UNT como del Movimiento por Venezuela (MPV) por no acompañar la hoja de ruta aprobada por una mayoría de ocho partidos y que antepone la defensa del resultado electoral del 28 de julio.
“En lo pragmático también es una pequeña victoria para el gobierno debido a que fragmenta, dispersa y minimiza la fuerza de la oposición.
Un nuevo escenario de negociación sólo será posible si quienes han decidido participar el 25 de mayo acumulan el suficiente músculo político para convertirse en interlocutores válidos frente a la coalición hegemónica gubernamental y eso solo será posible, obteniendo una votación representativa y espacios de poder en las regiones y la Asamblea Nacional y de llegar, con el ejercicio de un parlamentarismo que se verdad cuestione al poder y lo interpele”, apuntó Medina.
El número dos del chavismo, Diosdado Cabello, abonó a la intriga al afirmar que Capriles solicitó su habilitación política para poder ser candidato y que le fue concedida en conversaciones con el gobierno. Esto en respuesta a declaraciones del exgobernador de Miranda según las cuales su inhabilitación fue “sorpresiva”, negando cualquier negociación con Miraflores.
Peche Arteaga considera que en la política venezolana no hay nada definitivo, al referirse a la fractura opositora, pero lo ve como un distanciamiento bastante marcado con posturas que hasta ahora lucen irreconciliables. Acotó que solo el tiempo dirá si se logran construir nuevos puentes o formas de rehacer las relaciones políticas entre los factores que hoy llaman a votar y los que no.