Desde su natal Venezuela hasta los paisajes indomables de Estados Unidos, Marcos Mazzola ha llevado su pasión por la cámara a otro nivel. Especializado en capturar la pesca, la vida silvestre y la conexión del ser humano con la naturaleza, este videógrafo y fotógrafo ha construido una carrera inspirada por lo impredecible y lo genuino.
“No hay guión en la naturaleza”, asegura Marcos, y esa filosofía guía cada uno de sus proyectos. Lo que comenzó como una simple curiosidad, terminó siendo un llamado profesional que lo ha llevado a trabajar con grandes marcas y contar historias reales desde entornos donde todo puede cambiar en un instante.
De un encuentro casual a una carrera sólida como videógrafo
Con más de una década de experiencia en producción audiovisual, Marcos encontró su lugar en el mundo de la pesca deportiva casi por accidente. Pero ese hallazgo fortuito reveló una profunda afinidad por documentar lo vivo, lo espontáneo, lo que no se puede repetir.
Su amor por los espacios abiertos y las historias humanas lo llevó a conectar emocionalmente con los temas que captura. Para él, la cámara no es un simple aparato técnico, sino una forma de observar, escuchar y crear puentes emocionales como videógrafo.

Al frente de la producción de una industria millonaria
Hoy, Marcos se desempeña como senior video producer en Rather Outdoors, una de las compañías más influyentes de la industria de la pesca deportiva en Estados Unidos. Allí, lidera la creación de contenido para marcas icónicas como Quantum, Lew’s, Strike King, Zebco y Fox.
Su trabajo abarca desde la conceptualización hasta la edición final de campañas, lanzamientos y series como Kings of Bass, un proyecto donde la narrativa visual cobra un rol fundamental para representar a los pescadores de forma auténtica y apasionada.
Proyectos que trascienden lo visual
Además de su rol en Rather Outdoors, Marcos ha colaborado con marcas globales como Columbia y Under Armour, y ha participado en iniciativas profundamente humanas, como los viajes de pesca terapéutica organizados por The Iron Freedom Foundation para veteranos de guerra. “Ahí es donde el contenido deja de ser solo visual y se vuelve humano”, explica.
En cada uno de sus trabajos como videógrafo, Mazzola busca algo más que estética: quiere dejar una huella emocional. No trabaja por premios ni por reconocimientos: su objetivo es simple, pero poderoso—crear algo que conecte de verdad.
Una historia de pasión, riesgo y autenticidad
Marcos Mazzola representa a una nueva generación de creadores visuales que han sabido llevar su visión más allá de las fronteras. Con una cámara en mano y el corazón puesto en la historia, este venezolano ha encontrado su espacio en la industria de la pesca estadounidense, narrando desde el silencio del agua, el crujir del monte y la mirada de quien vive para contar.
Una historia que no solo habla de pesca, sino de cómo una pasión puede encontrar su lugar en el mundo cuando se vive con autenticidad.
