A pocos meses de que muchos estudiantes de los últimos años de bachillerato finalicen esta etapa de su formación académica, comienzan ya a abrirse para ellos las opciones de lo que podría ser su futuro próximo. Las universidades presentan sus ofertas, a la par de que los nervios por saber si «quedaré o no quedaré» arropan a los futuros bachilleres de la república.
En Venezuela, el sistema educativo enfrenta actualmente una de las crisis más severas de su historia que afecta profundamente a los estudiantes de bachillerato. Quienes están a punto de convertirse en universitarios llegan a la nueva etapa de estudios superiores con el estigma de no estar bien preparados para esa nueva vida estudiantil.
Según un informe del Sistema de Evaluación de Conocimientos en Línea (Secel) de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) correspondiente al período 2023-2024, más de 70% de los estudiantes de bachillerato (desde 6to grado de primaria hasta 5to año) reprueban en matemáticas y habilidad verbal, con calificaciones promedio de 7,51/20 y 7,84/20, respectivamente.
Afán y resiliencia ante todo
En la primavera de sus vidas, muchos de estos muchachos y muchachas, con edades entre 16 y 17 años, se muestran resilientes antes todos esos factores y no pierden la esperanza de proseguir sus estudios.
Prueba de ello se vio en la Universidad Central de Venezuela (UCV) este lunes y martes, donde la Secretaría realizó su segunda feria «Quiero ser Ucevista«, en la que brindaron información sobre las oportunidades académicas que allí ofrecen a estudiantes de 5° y 6° año de educación secundaria.

«Hay que volver a creer. Los jóvenes tienen que sentir que cursar una carrera de 5 años es posible y tiene sus méritos, no es algo lejano. Cuando ellos se preguntan por qué y para qué seguir o estudiar, yo les contesto: Todas las cosas tienen que cambiar; van a cambiar. En estos momentos, hay oportunidades y en Venezuela tendrán oportunidades los que estén más preparados», dijo la profesora Corina Aristimuño, secretaria de la UCV.
Siento que puedo
Fabián Espinoza, uno de los futuros bachilleres que acudió a «Quiero ser ucevista» este lunes, actualmente cursa 5° año en un conocido colegio privado de La Guaira. Su aspiración es estudiar Ingeniería en la UCV y, además de acudir a esta feria, ya se inscribió en el proceso de admisión Simadi.
«Sí, tengo mucha esperanza de quedar. Creo tener la vocación para ello y el promedio está dentro de lo que piden aquí. Yo veo que sí hay oportunidad de seguir en Venezuela, estudiar y ser el futuro. Hablo mucho con mis padres de ello y entiendo que hay que prepararse», expresó.

De la misma manera, Ana Valentina Delgado, quien desea estudiar Psicología, dice que se ha preparado en cursos preuniversitarios y buscará la manera de cumplir esa meta, así sea en la UCV o en otra universidad.
«Mis padres están dispuestos, si no quedo aquí, a hacer el esfuerzo de pagar una privada, como la Ucsar, que es la menos costosa. Quiero estudiar Psicología para ayudar a tanta gente que lo necesita en mi país; no he pensado en otro país; creo que aquí hay mucho por hacer», comentó.
El deterioro educativo tiene consecuencias directas en las competencias de los bachilleres. La prohibición de repetir grados, impuesta por el Ministerio de Educación, ha resultado en que muchos jóvenes egresen sin conocimientos básicos. Edgar Machado, presidente del Sindicato de Maestros de Caracas, señaló que algunos bachilleres no pueden tomar un dictado. Esa falta de preparación limita sus posibilidades de acceder a la educación superior o al mercado laboral formal.
Miranda Rengifo, estudiante, también de Caracas, ha escuchado sobre esas estadísticas y se muestra preocupada.
«Reconozco que tanto yo como muchos de mis compañeros tenemos promedios no tan altos; pero las ganas de estudiar son muchas. Llegar a la universidad es para mí un sueño, una meta y sé que llenará de orgullo a mi mamá. Quiero estudiar Odontología y hoy me explicaron lo que debo hacer. Tengo mucha esperanza», dijo.