Una solución a corto plazo. Así fue la reparación del tomógrafo del Hospital Oncológico Dr. Miguel Pérez Carreño de Naguanagua. Luego de estar por más de dos semanas dañado, el miércoles 5 de febrero se puso en funcionamiento, pero solo fueron atendidos seis pacientes porque presentó la misma falla y el equipo se apagó.
Se conoció que los técnicos volvieron el sábado, sin embargo, no lograron encender el aparato. Se espera que este lunes solventen el problema porque hay una larga lista de pacientes que requieren realizarse sus estudios de marcadores tumorales para continuar con sus tratamientos oncológicos.
Al menos 50 pacientes al día están agendados para tomografías en el lugar. Son citas que constantemente se reprograman por las fallas del equipo. Esto provoca que haya pacientes que esperan por ese examen desde hace más de un año.
Tomógrafo del oncológico de Naguanagua se dañó
Personas de diferentes regiones del país tienen su historia médica en el oncológico de Naguanagua, al ser el único con sus características en el sistema de salud pública. Hay quienes deben recorrer más de cinco horas de distancia y que, cuando pidieron la cita para realizarse los marcadores tumorales, tenían más de 600 pacientes por delante en la lista.
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La mayoría de quienes se operaron de algún tumor y recibieron quimioterapias, requiere de este estudio para iniciar sus ciclos de radioterapias para erradicar las células cancerígenas y prevenir o retrasar su reproducción.
Lo recomendable es que la tomografía se haga en un lapso de 45 días después de la cirugía, pero ante las fallas del único equipo con atención gratuita y la alta demanda de pacientes, las citas las agendan con un periodo de más de un año de espera.
Pacientes del oncológico aseguraron que esta situación se repite en otros departamentos como quimioterapia y el de patología.
