De acuerdo con los registros asociados al sitio arqueológico de Parmana, este se sitúa a 1 km del caserío Parmana, en la margen izquierda del río Orinoco, de adscripción pública con administrador/custodio o responsable la alcaldía del municipio Leonardo Infante del estado Guárico. Este sitio arqueológico ha sido investigado por el antropólogo Howard en 1941, posteriormente por Anna Roosevelt, lrving Rouse y José Maria Cruxent, en 1958, y luego por Iraida Vargas y Carlos Ríos Roldán entre 1972 a 1978.
Parmana, es un sitio arqueológico que se ubica en lo que se conoce como el bajo llano. Su forma plana, con muy pocas zonas elevadas, hace que durante la época de invierno sea proclive a las inundaciones. En esta área la vegetación se caracteriza por ser chaparrales, selvas de galerías y morichales.
Parmana fue fundada por fray Tomás de Pons en 1733 aproximadamente, con esclavizados provenientes de Yaracuy, las costas de Puerto Cabello, Tucacas y Aroa, que formaron parte del movimiento armado de 1731, logrando unir a indígenas, afrodescendientes y eurodescendientes, encabezado por el líder zambo Andrés o Juan Andrés López del Rosario, conocido como «Andresote» en contra de la Compañía Guipuzcoana, que monopolizaba el comercio entre Venezuela y España. Parmana se ubica al sur del estado Guárico, en el municipio Leonardo Infante, parroquia Espino a 192 km de Valle La Pascua, en el límite con el estado Bolívar, separados solo por el majestuoso río Orinoco.
El sitio arqueológico Parmana se compone a su vez de dos yacimientos Ronquín y La Gruta. En el yacimiento conocido como Ronquín, está ubicado frente a la isla Rabo Pelado y se trata de un área monticular. Se realizó una serie de excavaciones donde se recuperaron fragmentos cerámicos, artefactos líticos, dientes humanos y de animales. Los fragmentos cerámicos presentan una decoración plástica como el punteado, modelado e incisión.
En relación al yacimiento La Gruta, ubicado al margen izquierdo del río Orinoco, al sur del estado Guárico, se halló superficialmente material cultural, fragmentos cerámicos, artefactos líticos y un jagüey —construcción artificial elaborada en tiempos prehispánicos para el almacenamiento de agua— o tanque de agua. Los fragmentos cerámicos presentan una decoración plástica como el punteado y modelado. Los artefactos líticos conseguidos en ambos sitios son metates, manos de moler, hachas, buriles, puntas, entre otros. La cerámica indígena posiblemente sea parecida a la serie saladoide, ubicándose entre 650 años antes de Cristo hasta 335 años después de Cristo.
El Yacimiento Ronquín, ubicado en el río Orinoco medio, cerca del puerto de Parmana. En el lugar hay una valiosa riqueza arqueológica donde destacan restos de ollas, recipientes, tiestos funerarios o cerámicas zoomorfas que permitieron confirmar la presencia prehispánica de una comunidad que vivía de la siembra, la pesca y la cacería. Las investigaciones arqueológicas en los yacimientos Ronquín y La Gruta se realizaron en 1981 por Iradia Vargas Arenas, Van Der Merwe, R. Curlenis y J. Vogel quienes coincidieron que es el Orinoco medio. En el lugar existieron asentamientos humanos entre 400 y 800 años antes de Cristo, lo cual fue determinado a través de fitolitos o restos carbonizados de granos de maíz y tusa. Para preservar el valor de las piezas y la zona, la alcaldía del municipio Leonardo Infante inició gestiones a través del Centro de Arqueología y Etnohistoria del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas, IVIC, para que se realicen investigaciones básicas y aplicadas, análisis, evaluación, recuperación, protección y ordenamiento de las piezas que son parte del patrimonio del municipio.
Los Mangos, sitio arqueológico: localizado a orillas del río Orinoco se encontraron abundantes fragmentos cerámicos como bases, bordes, apéndices antropomorfos y zoomorfos con decoración incisa, punteada y aplicada. También hubo presencia de artefactos líticos como raspadores, lascas y material europeo como mayólica con una decoración basada en flores y pájaros. La cerámica indígena posiblemente sea parecida a la serie saladoide y al estilo Ronquín, el cual se ubica en el periodo II 1000 después de Cristo.
Parmana y Los Mangos, sitios arqueológicos, además de los yacimientos Ronquín y La Gruta, están declarados Bien de Interés Cultural por el Instituto del Patrimonio Cultural (IPC), según Providencia Administrativa N° 003/05 del 20-02-2005, publicada en la Gaceta Oficial N° 38.234 del 22-05-2005 y redefinido en categorías y subcategorías patrimoniales mediante el Sistema RPC-Venezuela, según Providencia Administrativa N° 025/13 del 02-08- 2013, publicada en la Gaceta Oficial N° 40.230 del 16-08-2013.
En sintonía con el profesor Carlos Ríos Roldán, quien es portador de saberes, conocimientos y técnicas de la tradición, antropólogo y doctor en ciencias sociales egresado de la UCV, catedrático emérito en la Escuela de Medicina de la Universidad Rómulo Gallegos (San Juan de los Morros, estado Guárico), director fundador de la fundación Orquesta Sinfónica del Estado Guárico y maestro de Tai Chi, quien apuntala: «Parmana es el museo más grande sobre la permanencia humana, 3000 años antes de Cristo al presente, maíz y mandioca a lo largo de la Amazonía», lo que indica que, parte sur del estado Guárico era el sitio más importante para el control del paso y la vía más importante que unía a Amazonas, la Meseta Chibcha, el Caribe oriental venezolano, el Caribe del norte y la cuenca del Lago de Valencia. Una acotación, por parte del investigador en el tema de la sensibilización y de la educación en patrimonio cultural, que «los restos cerámicos o tiestos son importantes, pero al sacarlos pierden valor porque están fuera de contexto arqueológico, por consiguiente no sirven y no dicen nada. No se les puede hacer ninguna lectura arqueológica».
El Prof. Ríos hace hincapié en que, antes de que llegasen los europeos ya había pobladores en Parmara. Y para el año «0» antes de Cristo, había comunidades estables que tenían más de 500 años en los sitios de Ronquín, La Gruta, y en otros sitios aledaños al sur de Anzoátegui, lo que supone que eran una gran confederación o grupos iguales que controlaban todo ese paso.
Es importante destacar que el Dr. Carlos Ríos realizó trabajo de campo en el sitio arqueológico de Parmana hacia 1974. Con él, también participaron Pastor Edilio Ponce Arriechi, Miguel Perera, Carlos Alberto Martín y Alessandro Oramas, todos antropólogos.
¡Preservemos y salvaguardemos los sitios arqueológicos de Parmana y Los Mangos, asimismo, los yacimientos Ronquín y La Gruta, y el legado de Carlos Ríos Roldán entre otros especialistas para las nuevas generaciones!