El Gobierno de los talibanes ha impuesto una serie de directivas extralegales que han restringido severamente las operaciones de las estaciones de televisión y otros medios de comunicación, silenciado casi por completo las voces del país, denunció este jueves el principal gremio de prensa del país.
El Centro de Periodistas de Afganistán (AFJC) afirmó en un comunicado que, durante el año pasado, "al menos 12 canales de televisión en todo el país han sido cerrados, ya sea directamente por los talibanes o como resultado de las reglas cada vez más estrictas que rigen las operaciones de los medios".
Si bien el Gobierno de facto ha aprobado tácitamente la Ley de Medios de Comunicación de Afganistán, los hallazgos recientes del AFJC indican que, en los últimos tres años, los talibanes han emitido al menos 21 directivas junto con la Ley de Medios de Comunicación.
También de tu interés: Rusia dice que base estadounidense de antimisiles en Polonia ya está en su punto de mira
De estas directivas, siete se centran en el trabajo televisivo o restringen la libertad de los medios visuales, mientras que las restantes se aplican a todos los medios de comunicación en general.
Gremio de prensa afgano
“Prohibir a las mujeres trabajar en la televisión nacional, prohibir la participación de las mujeres en dramas televisivos, prohibir la emisión de películas y series, obligar a las periodistas a cubrirse el rostro", son algunas de las medidas que rigen en varias regiones del país, aseguró.
Los talibanes además han prohibido las filmaciones y las entrevistas en video, que se han implementado oficialmente en cuatro provincias, la transmisión de programas internacionales, los debates televisivos en vivo, y la invitación de expertos no aprobados por el Gobierno, enumeró.
Durante este período, al menos 30 periodistas y trabajadores de los medios de comunicación han sido detenidos, siete de los cuales siguen en prisión.
La declaración describió además que estas órdenes prohíben ciertas acciones de los medios de comunicación y los periodistas, pero no especifican las consecuencias de violarlas.
Sin embargo, los hallazgos del Centro de Periodistas de Afganistán indican que los funcionarios de los medios de comunicación y los periodistas que han ignorado estas órdenes han sido amenazados o encarcelados, y los medios de comunicación se han enfrentado a acciones punitivas, incluido el cierre.
Afganistán ha sufrido la desaparición de más de la mitad de los 547 medios que operaban en el país desde la llegada de los fundamentalistas al poder en agosto de 2021, que llevó a muchos periodistas a abandonar el país por temor a los talibanes.
El país asiático, que ya antes era considerado como uno de los más peligrosos del mundo para los profesionales de la información, se situó en el puesto 178 de 180 países en el último índice de libertad de prensa de Reporteros Sin Fronteras (RSF).