Entrenar, divertirse y triunfar. Esa es parte de la premisa de Johana Lara Espino, quien se consagró como la atleta más destacada de los XIII Juegos Nacionales de Docentes Jubilados, Pensionados y Desincorporados, al representar a Carabobo.
Para eso se preparó. A diario entrenaba sus tácticas y estrategias en tenis de mesa y ajedrez para lograr tres medallas de oro en la competencia que se realizó del 8 al 13 de septiembre en San Juan de los Morros, con la participación de 18 estados.
Ganó invicta el primer lugar en ajedrez y fue la única atleta mujer en tenis de mesa en estos juegos nacionales, disciplina en la que logró medalla de oro individual y mixto, además de segundo lugar por equipo.

Atleta por disciplina
En 1999 se graduó en la Universidad de Carabobo (UC) como docente en educación física, deporte y recreación, y luego hizo una maestría en docencia universitaria. Pero desde niña siempre le apasionó la actividad física.
Practicó kárate y es cinta negra. Como atleta integral, también se dedicó al softbol como pitcher y segunda base, pero una fractura en la tibia y peroné hizo que abandonara ambas disciplinas y se dedicara, desde hace más de 20 años, al tenis de mesa y al ajedrez.
Como maestra aún activa, en los juegos interdocentes de hace 18 años logró el jaque mate más rápido.
El año pasado, en los XII Juegos Nacionales de Docentes Jubilados, Pensionados y Desincorporados, que se realizaron en Carabobo, obtuvo el título de la atleta más valiosa al conquistar primer lugar en individual en tenis de mesa y mixto, doble femenino y ajedrez femenino.
Inspiración deportiva
También fue entrenadora de básquet de su hijo, Jonathan Matute Lara, quien es actualmente atleta de la selección de Venezuela, medallista internacional y médico de la UC.
“Mi inspiración es competir y socializar. Hay que ser atleta humilde y cortés en todo su esplendor. Me encantó jugar las dos disciplinas en este nacional, me preparé y, aunque tuve nervios al enfrentarme a la campeona, me enfoqué, respiré profundo, usé mi amuleto que es una piedrita azul con energías positivas que me equilibran y controlan, y gané”.
A todas las mujeres, sin importar la edad, les aconsejó que nunca dejen de entrenar alguna actividad física, porque el secreto de la eterna juventud es el deporte.