Una adolescente de 13 años fue sometida a un procedimiento irregular durante su visita al centro de reclusión militar de Ramo Verde, en el estado Miranda. Según la denuncia del Comité por la Libertad de los Presos Políticos (Clippve), a la menor la obligaron a desnudarse antes de ingresar a la prisión para visitar a su padre, el sargento José Bandrés.
A través de un video difundido en las redes sociales, Sandra Hernández, madre de la adolescente, afirmó que en los cinco años que lleva visitando a su esposo nunca había ocurrido una situación similar.
Organizaciones defensoras de derechos humanos interpretaron esta medida como una nueva forma de presión ejercida contra los familiares de presos políticos en Venezuela. “Las denuncias de maltrato, vejaciones, requisas abusivas y violencia hacia las mujeres que visitan a presos políticos en las cárceles, y aquellas que siguen recluidas, han sido constantes”, mencionó el Clippve.
La organización también señaló que el director del centro de reclusión justificó la requisa alegando que estuvo avalada por un Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente. Sin embargo, no se han ofrecido detalles oficiales sobre la legalidad de la medida ni sobre las razones específicas para su aplicación.
Tras la difusión de la denuncia, al sargento Bandrés lo trasladaron a una celda de aislamiento. El Comité consideró el hecho como una represalia directa por la exposición pública del caso. “Exigimos el cese inmediato de estas prácticas que transgreden la dignidad humana y el respeto irrestricto a los derechos humanos de los presos políticos y sus familias”.
