Resulta insólito, más que paradójico, que el régimen 'antimperialista'' haga esfuerzos que rozan el desespero, para lograr que el "imperio mesmo" compre petróleo, les garantice el visto bueno para sostenerse en el poder.
Es evidente, que la política norteamericana actual se debate entre el pragmatismo de Trump y la cultura política de oponerse a gobiernos que violan DD.HH. Antes, igual que para Rusia o China, privó la cultura del intervencionismo.
Es pertinente preguntarse: ¿Los ingresos petroleros han servido para resolver la crisis del país? ¿Ha dejado de irse la luz, mejorado salarios y pensiones, resuelto la provisión de gas a las comunidades, impedido que los venezolanos se abran horizontes en otros países, la inflación, el desempleo, el hambre?
Las respuestas deben ir al fondo del modelo político, económico. Cuando entraron al poder manejaron la mayor cantidad de dinero de toda la historia, 2 billones de dólares, 2 millones de millones. El populismo llevado a instancias internacionales, el despilfarro, la corrupción, el abandono de la industria petrolera, la destrucción del aparato productivo del país, no son accidentes sociales o económicos. Es un modo resentido de concebir el poder, la economía, la sociedad, el país.
¿Será mejor entenderse, acordarse con un gobierno cuyo propósito es la estabilidad, la seguridad, paz, el progreso compartido, como el que representa Edmundo y María Corina, que con un gobierno como el que representa el dictador y sus secuaces, que vive de sacar provecho del chantaje geopolítico, el trueque de rehenes y las alianzas con fuerzas siniestras que arriesgan la seguridad y estabilidad de América y el mundo? ¿Cómo pedir garantías del cumplimiento de acuerdos, a quien reiteradamente incumple porque tiene compromisos con el delito que obedece a alianzas inescrupulosas?
Necesitamos la paz y la vida, la libertad y la prosperidad, la democracia y la convivencia geopolítica; los usurpadores viven y necesitan como el aire la violencia, la pobreza, el terror, ese es su único destino porque es la única manera de sobrevivir y mantenerse.