Durante sus 58 años de carrera, David Lynch marcó una época con películas y series que se han convertido en clásicos. Tras su muerte, el 16 de enero de 2025, deja un gran legado en el cine y la televisión.
Lynch trabajó en una gran cantidad de producciones a lo largo de su trayectoria. A continuación, contamos cuáles son las cinco que debes ver para entender la filmografía del director, productor y guionista estadounidense, fallecido a los 78 años de edad en Los Ángeles.
Cabeza borradora, un debut impactante
En este recuento no puede faltar el filme que lo inició todo: Cabeza borradora, estrenada en 1977. Este filme, que fue grabado en blanco y negro, estableció el tono de la carrera de Lynch y también lo convirtió en un referente del cine independiente.
Cabeza borradora narra la degeneración mental del protagonista, encarnado por Jack Nance, quien debe cuidar a un extraño bebé. Esta trama, que explora los rincones más oscuros de la mente humana, combina elementos de horror y comedia, lo que dejó intrigada y desconcertada a la audiencia de ese entonces, según los comentarios de la crítica.
Esta capacidad de generar atmósferas inquietantes fue elogiada por reconocidos críticos como el ganador del Premio Pulitzer Roger Ebert, quien en 1997 dijo que «David Lynch es un maestro de la atmósfera, y su habilidad para crear un sentido de inquietud es incomparable”.
El hombre elefante, su primer gran éxito
Después de Cabeza borradora, llegó en 1980 El hombre elefante. Esta película, en blanco y negro, se basa en la historia real de Joseph Merrick, un hombre con deformidades físicas extremas.
Pese a que el largometraje cuenta la triste y difícil vida que tuvo el apodado «hombre elefante», Lynch invita a reflexionar sobre la belleza en lo que la sociedad considera diferente o “raro”.
Roger Ebert destacó que «es una película que nos recuerda que la verdadera monstruosidad no reside en la apariencia física, sino en la falta de compasión y humanidad”.
Tanto la actuación de John Hurt, encargado de interpretar a Merrick, como la dirección de Lynch fueron elogiadas, y ambos fueron nominados a los Premios Óscar de 1981 en las categorías de Mejor Actor y Mejor Director respectivamente.
El filme también optó por otros seis premios en esa edición de los Premios de la Academia, entre ellos el de Mejor Película.
Terciopelo azul, un viaje al lado oscuro de la vida suburbana
Otra infaltable es Terciopelo azul, filme estrenado en 1986 que se adentra en la oscuridad que acecha bajo la superficie de la vida suburbana.
“Cuando vuelve de visitar a su padre en el hospital, el joven Jeffrey Beaumont encuentra una oreja humana semidevorada por las hormigas. Jeffrey decide llevársela al detective Williams”, es la sinopsis de la cinta.
Para esta producción, Lynch contó con un elenco estelar que incluía a Kyle MacLachlan, Isabella Rossellini y Dennis Hopper. La trama explora temas complejos como la violencia y la naturaleza humana.
Terciopelo azul es un gran ejemplo del estilo distintivo de Lynch, donde lo cotidiano se entrelaza con lo macabro. Con su surrealismo, el director desafiaba continuamente al espectador a cuestionar la realidad de lo que estaba viendo.
«Lynch es un artista que desafía las convenciones del cine. Su trabajo es una exploración de la mente humana, donde lo extraño y lo familiar se entrelazan de maneras sorprendentes”, escribió en su reseña para la revista Newsweek el crítico David Ansen.
Gracias a este trabajo, Lynch estuvo nominado a Mejor Director en la edición de los Oscars de 1987. Sin embargo, el ganador de esa noche fue Oliver Stone por Platoon.
Twin Peaks, la revolución de la televisión
Aunque Lynch se hizo un nombre en el mundo del cine entre la década de 1970 y 1980, no se puede hablar de su legado sin mencionar Twin Peaks. Esta serie cambió el panorama de la televisión en 1990, debido a su mezcla de misterio, drama y elementos sobrenaturales.
Emitida entre 1990 y 1991, Twin Peaks siguió a un agente del FBI que viaja a un pueblo ficticio, que da nombre a la serie, para investigar un misterioso asesinato.
Pese a solo contar con dos temporadas, se convirtió en un fenómeno cultural e influenció producciones posteriores.
David Chase, creador de la galardonada serie de HBO Los Soprano, dijo a la revista Time en 2017 que antes “los programas contaban al público lo que acababan, pero con Twin Peaks te lo muestran y te dejan pensando: ‘¿Qué acabo de ver?’ Eso fue revolucionario”.
En 2014 se estrenó una película, también dirigida y escrita por Lynch, para continuar la historia. Finalmente, en 2017 volvió para una tercera y última entrega.
Sueños, misterios y secretos, un enigma cinematográfico
En 2001 llegó a las salas de cine Sueños, misterios y secretos, una cinta con una narrativa no lineal que desafía al espectador a desentrañar sus múltiples capas.
La trama sigue a una mujer con amnesia que vaga por las calles de Los Ángeles en busca de su verdadera identidad, cuando se cruza con una aspirante a actriz que trata de ayudarla.
Como toda la filmografía de Lynch, Sueños, misterios y secretos destaca por jugar con lo que es real y lo que no. Peter Travis, crítico de cine de la revista Rolling Stone, destacó que «con cada película, Lynch nos lleva a un viaje a lo desconocido, donde la lógica se disuelve y la emoción se convierte en la única guía”.
El filme le valió a Lynch una tercera nominación al Oscar a la Mejor Dirección y los críticos la consideran un testimonio de la creatividad del cineasta.
El legado de David Lynch será duradero
Pese a no ganar nunca un Premio de la Academia, recibió un Oscar Honorífico en la ceremonia de 2019 por su trayectoria.
El legado de David Lynch es innegable. A través de estas cinco producciones, podemos apreciar su visión única y su habilidad para explorar los aspectos más complejos de la condición humana.
Como dice el crítico venezolano Sergio Monsalve: “sin Lynch no habría Tarantino, tampoco A24 y buena parte de la cosecha actual de Cannes y el Oscar, de La Sustancia para abajo, todo el cine artístico es hoy lynchesco”.
Cada una de estas producciones están disponibles en la plataforma de streaming Amazon Prime.