La administración de Nicolás Maduro, quien juró para un tercer mandato el pasado 10 de enero pese a las denuncias de fraude electoral, calificó como un «secuestro» la separación de la niña Maikelys Antonella Espinoza Bernal por parte de las autoridades estadounidenses.
Este lunes, 28 de abril, en un comunicado aseguraron que la niña «fue separada de su madre en el momento en que ella iniciaba un vuelo de repatriación a Venezuela, y como tantas violaciones a los derechos humanos de nuestros migrantes y en contravención de las normas internacionales».
Citaron la Declaración Universal de los Derechos del Niño y la Carta Fundamental de Naciones Unidas como dos de los instrumentos que violó Estados Unidos al separar a Maikelys Antonella de su mamá, como la propia Casa Blanca admitió durante el pasado fin de semana.
También denunciaron que el papá de la pequeña, fue enviado a El Salvador al relacionarlo con la banda criminal el Tren de Aragua, lo que señalaron se trata de «un secuestro, sin ninguna fórmula de juicio, ni que media acción de tribunal alguno, al que sátrapa de Bukele erigió en El Salvador».
En el texto añaden que a los migrantes los someten a «tratos indignos y crueles, se separa a las familias venezolanas y se envía a ciudadanos venezolanos a campos de concentración de terceros países de gobiernos cómplices y lacayos (de Estados Unidos)».
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Qué dijo EEUU de la niña migrante y su papá
El Departamento de Seguridad Nacional de EEUU (DHS por sus siglas en inglés) confirmó el pasado 26 de abril que colocó a la niña en una familia de acogida en suelo estadounidense, después de que acusara a su papá, Maiker Espinoza Escalona, de ser un supuesto teniente del Tren de Aragua, grupo al que Donald Trump identificó como terrorista al asumir su segundo mandato en enero y al que acusa de provocar una invasión a su país.
Las autoridades señalan que Espinoza Escalona se encargaba de «coordinar homicidios, tráfico de drogas, secuestros, extorsiones, tráfico sexual y la operación de una casa de tortura«.
También acusó a la mamá, Yorelis Escalona, a quien deportaron la semana pasada, como una persona encargada del supuesto «reclutamiento de jóvenes mujeres para el narcotráfico y la prostitución».
El viernes pasado, después de que llegara un vuelo con 199 migrantes venezolanos, el titular de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, denunció la separación de la niña y su mamá, lo que en ese momento llamó un «secuestro».
Familia defiende inocencia de migrante venezolano
Pese a los señalamientos de Estados Unidos, la familia del padre de la niña migrante dijo al diario digital Tal Cual que el joven no es delincuente ni miembro del Tren de Aragua. Es nativo del estado Barinas, en los llanos occidentales venezolanos, estado del que salió en febrero de 2024.
En mayo del año pasado al ingresar a territorio estadounidense lo detuvieron junto a la pequeña y su esposa. El medio destaca que aunque tenía orden de deportación desde julio de 2024, Estados Unidos lo envió al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) de El Salvador en marzo pasado, cuando se produjo la deportación de 238 venezolanos a esa cárcel de máxima seguridad en el país centroamericano.
«Exigimos la inmediata devolución de Maikelys a la República Bolivariana de Venezuela y que se restituya el Estado de Derecho y las prerrogativas elementales que nuestra pequeña niña tiene como lo establece la Declaración Universal de los Derechos del Niño», señaló el comunicado de Miraflores sobre el más reciente episodio de los cuestionamientos a las políticas migratorias de Donald Trump contra la migración venezolana.