Jesus Alvarez preso politico
A la derecha Jesús Álvarez, preso político muerto bajo custodia del Estado venezolano. A la izquierda su hijo Jesús Alejandro Álvarez denunciado que no le entregan el cadáver de su padre

La mañana del domingo familiares del preso político Jesús Álvarez, de 44 años de edad, sepultaron en Anaco, estado Anzoátegui, los restos mortales del hombre, quien falleció el viernes en la madrugada mientras estaba bajo custodia del Estado. 

Según informó el Comité por la Liberación de los Presos Políticos (Clippve) el cuerpo de Álvarez fue sepultado en presencia de su hijo, Jesús Alejandro, y bajo supervisión de funcionarios del Estado. 

“Sus dos hijas menores, de 7 y 17años, no pudieron estar para darle el último adiós. La señora Álvarez tampoco estuvo durante el entierro, pues se encuentra detenida injustamente en el Destacamento 625 de la GNB, en Pto. Ordaz, desde el #2Ago”, informó la organización. 

El señor Álvarez no pudo ser velado debido a que su cuerpo se encontraba, según funcionarios del Estado, en avanzado estado de descomposición. 

La entrega del cuerpo de Jesús Álvarez 

La noche del sábado, 14 de diciembre, casi dos días después de su deceso el Estado autorizó el retiro y traslado del cadáver del sr.  Jesús Rafael Álvarez, a su hijo Jesús Alejandro Álvarez Sánchez, desde la morgue del Hospital Central de Valencia hasta la localidad de Anaco en el estado Anzoátegui, donde tiene fijada su residencia la familia Álvarez Sánchez. 

La organización Clip le expresó su apoyo a la familia Álvarez Sánchez y prometió “no dejar de lucha hasta que haya justicia para el señor Álvarez, la libertad plena para su esposa, Anny Sánchez”. 

“Exigimos justicia y reparación. El Estado es el principal responsable de la muerte en custodia de Jesús Rafael Álvarez”, añadió la ONG. 

Jesús Álvarez, segundo preso político post electoral que murió en custodia del Estado

El preso político Jesús Rafael Álvarez, de 44 años de edad, murió el jueves 12 de diciembre en la cárcel de Tocuyito, en el estado Carabobo, mientras estaba en custodia del Estado venezolano. 

La ONG Observatorio Venezolano de Prisiones confirmó el deceso de Álvarez e informó que la madrugada del 13 de diciembre, Jesús fue sacado del penal, pero no de la manera que esperaban sus seres queridos: ya estaba sin vida y su cadáver fue trasladado al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf).

La noche del 13 de diciembre, el hijo de Jesús Álvarez se trasladó hasta la cárcel de Tocuyito, luego de enterarse en redes sociales del rumor del fallecimiento de su padre. Nadie del Ministerio de Servicio Penitenciario le había informado del fallecimiento. 

“Mi papá era una persona sana, no padecía de nada. Allí lo castigaban solo por tener hambre. Si se quejaba, lo aislaban y amarraban. Si pedía hablar con la familia, lo golpeaban. A mi papá lo castigaron y lo mataron en la cárcel”, expresó el hijo de Jesús entre lágrimas.

Jesús fue detenido el 2 de agosto, junto a su esposa Anny Suárez de Álvarez, en El Callao, estado Bolívar. Ambos fueron trasladados a una sede de la Guardia Nacional en Puerto Ordaz. Un mes después, Jesús fue trasladado al penal de Tocuyito.

El hijo de Jesús reconoció el cadáver de su padre en una foto. En dicha foto vio a su papá irreconocible: demacrado, con barba, extremadamente delgado, apenas una sombra de la persona que había sido al momento de su detención en El Callao. Observó que tenía el pómulo hinchado, con signos evidentes de un golpe. Insistió en que su padre era una persona sana antes de entrar en prisión.