Mariana González de Tudares, hija del líder opositor Edmundo González Urrutia, denunció este jueves 9 de enero que su esposo, Rafael Tudares Bracho, continúa desaparecido tras ser presuntamente detenido por agentes de seguridad del Estado el pasado 7 de enero.
En su declaración, el arresto del yerno del opositor ocurrió a las 12:39 del mediodía, y desde entonces no existe información sobre su paradero, condiciones de detención o integridad física.
A través de un comunicado, González de Tudares expresó que tanto ella como el abogado de la familia visitaron múltiples centros de detención, incluyendo las sedes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET), División de Investigación Penal (DIP) y el Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana (CNPB), sin éxito en obtener información sobre el lugar donde Tudares se encuentra recluido. Asimismo, destacó que hasta ahora se le ha negado cualquier acceso al detenido, incluyendo el derecho a una llamada, visitas familiares y a la asistencia de un abogado de confianza.
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González de Tudares calificó la detención de su esposo como un «secuestro» y enfatizó que esta acción es una medida de «retaliación política» contra su padre, Edmundo González Urrutia. Señaló que las autoridades intentan vincular a Tudares con hechos políticos recientes, lo que ella desmintió categóricamente, argumentando que su esposo no tiene relación alguna con actividades políticas ni con las acusaciones que se han formulado en su contra.
“Exigimos que se nos informe urgentemente dónde está mi esposo. Este secuestro no solo atenta contra sus derechos humanos, sino que también pone en evidencia el nivel de persecución política que vivimos. Rafael es inocente y no merece ser tratado como un criminal”, declaró González.
El costo de la lucha
La esposa del detenido insistió en que su familia está sufriendo una persecución política que no debería extenderse a todo su entorno personal y familiar.
“Entendemos que el régimen intenta intimidar y callar a quienes buscan un cambio en Venezuela. Sin embargo, no aceptaremos que el costo de esta lucha sea el sufrimiento de inocentes. Mi esposo no está vinculado a ningún delito, y exigimos que sea liberado inmediatamente”, añadió.
La denuncia se produce en medio de un ambiente de alta tensión política en Venezuela, a solo horas de la toma de posesión presidencial el próximo 10 de enero, que tanto González Urrutia como el mandatario Nicolás Maduro, aseguran que concretarán.
