La hostilidad y la discriminación marcan este Día Mundial de los Refugiados en Estados Unidos. Por primera vez este país suspendió su Programa de Admisiones de Refugiados (USRAP) y los fondos relacionados. Mantiene a organizaciones civiles y a estos inmigrantes en la incertidumbre, según expresan a EFE.
EE.UU. recibió a más de 100 mil 000 refugiados en 2024, récord en 30 años. Una de las primeras medidas de la Administración de Donald Trump fue frenar el USRAP. Esta acción se sumó a la revocación de Estatus de Protección Temporal (TPS) y el 'parole' humanitario. También a restricciones de viaje a países como Cuba, Haití y Venezuela.
En medio del panorama hay personas como Ana Lastra y Julio Villegas. Los esposos llegaron con dos hijos a Miami como refugiados legales hace casi tres años, después de recorrer Colombia y Ecuador tras huir de Venezuela. Allá permanecen su hija y la madre de ella, ahora con la incertidumbre de si podrán reunirse.
"Hay incertidumbre, hay que ver, esperemos que (Trump) lo haga lo mejor posible, que sean realmente las personas que están haciendo mal las personas que él saque del país. Siempre hay un daño colateral, es lamentable, pero esperemos que las cosas cambien, que mejoren", expresó Lastra a EFE.
Villegas recuerda que llegaron al país de forma legal, con un programa de Naciones Unidas para reasentarse. "Estados Unidos nos escogió a nosotros".
Un panorama sin precedentes
El país norteamericano ha acogido a unos 3,1 millones de refugiados en gobiernos republicanos y demócratas desde la aprobación del USRAP en 1980, según el Consejo de Refugiados de Estados Unidos (RCUSA). Texas, California, Nueva York y Florida fueron las principales entidades de recepción en 2024.
Pero la reubicación de refugiados a Estados Unidos se ha frenado por primera vez en la historia, expresó Jamie Scotti-Everett. Ella es la directora ejecutiva de Refugee Assistance Alliance (RAA), asociación en Coral Gables, Florida, que apoya a estos extranjeros, como la pareja venezolana.
"Es un momento realmente desafiante para los servicios a refugiados. Hay una narrativa muy hostil alrededor de los refugiados en este momento. Ese no siempre ha sido el caso en Estados Unidos. Históricamente siempre hemos sido un país muy hospitalario con ellos", expresó a EFE.
Ante los recortes, RAA organiza una recaudación de fondos para seguir con el apoyo a estas personas. "Nunca habían estado tan marginadas y privadas de sus derechos como están ahora. No hay nadie más haciendo este trabajo porque se han quedado sin dinero".
Para Scotti-Everett, el discurso político y la polarización afectan profundamente a nuestras familias, nuestra organización y el futuro de la acogida de refugiados. Si organizaciones como la nuestra no siguen abiertas y el asentamiento de refugiados se desmantela por completo, cuando llegue la próxima Administración, todo tendrá que reconstruirse.
Discriminación y empleo, mayores desafíos
Villegas indicó que el proceso de adaptación en Estados Unidos realmente sencillo no es. "Si tú no llevas una mano que te ayude, cuesta mucho".
Lastra es contadora y trabajó 18 años en el Ministerio de Educación de Venezuela. Allí la persiguieron por militar en el opositor Voluntad Popular, pero en Estados Unidos está desempleada.
Villegas es ingeniero y ahora labora como chef. "La discriminación dentro de los empleos también es un impacto muy fuerte. De hecho, lo demás viene solo porque uno se tiene que encaminar y tiene que corregir todos los percances que le vengan. Como decimos nosotros en nuestro país: para adelante y para allá".
Este Día Mundial del Refugiado, él pide entender que ayudar a los refugiados es un gesto de humildad. "Es salvar muchas vidas porque salir de Venezuela por la persecución no es algo que deseábamos, pero volver no es opción".
"Los refugiados entramos de manera legal acá a Estados Unidos. De hecho, nosotros somos sometidos a una investigación para entrar acá, venimos a trabajar. Sí les solicitamos que nos den una mano amiga es porque estamos huyendo, en mi caso no de una guerra, pero sí de torturas, persecución, violencia, cárcel".