Sandra Hernández, esposa del sargento Luis Bandres, preso político venezolano desde enero de 2019, denunció desnudez forzada contra su hija de 13 años en la prisión militar de Ramo Verde, este sábado, 8 de marzo.
Hernández denunció a través de un vídeo publicado en redes sociales que su hija, una adolescente, fue obligada a bajarse los pantalones por parte de las custodias que hacen la revisión corporal para el ingreso de la visita a la cárcel militar, ubicada en el estado Miranda.
«Le dijeron que debía bajarse los pantalones para demostrar que en sus partes íntimas no llevará nada ilegal», relató Hernández. «Durante 6 años de la reclusión de mi esposo, eso jamás había pasado con mi hija», argumentó.
El portal en X del Comité por la Libertad de los Presos Políticos de Venezuela (Clippve) consideró el hecho como evidencia de una nueva escalada de abuso y violencia contra las familias de los presos políticos.
Según lo informado por Clippve, el director de la cárcel militar habría justificado la medida con una supuesta autorización de un Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente.
La organización reiteró que las denuncias de maltrato, vejaciones, requisas abusivas y violencia hacia las mujeres que visitan a presos políticos en las cárceles –y aquellas que siguen recluidas– han sido constantes.
Tras hacer pública esta denuncia, el director de la cárcel ordenó que el sargento José Bandres fuera llevado a aislamiento, en un claro acto de represalia y castigo, destacó el comité.
Clippve exigió «el cese inmediato de estas prácticas que transgreden la dignidad humana y el respeto irrestricto a los derechos humanos de los presos políticos y sus familias».