Inameh pronostica lluvias por la onda tropical 43

El clima en Venezuela se mantiene afectado por diversos sistemas atmosféricos que inciden en el país, este martes 28 de enero. Según el informe del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inameh), la situación meteorológica se ve influenciada de distintos sistemas frontales, así como de áreas de alta y baja presión en el Océano Atlántico.

Esta dinámica incide en las condiciones del tiempo en el territorio venezolano, con cielo mayormente poco nublado en gran parte de su extensión.

Por la mañana, se espera la presencia de nubosidad de tipo estratiforme, lo que originará lluvias y lloviznas dispersas en algunas regiones del país, principalmente en las zonas de Delta Amacuro, el este de Sucre y Monagas. Esta situación se debe a los Vientos Alisios provenientes del noreste, que continúan transportando humedad hacia la franja norte costera.

De igual manera, se observarán algunas áreas nubladas en el suroeste de Bolívar y sur de Amazonas, las cuales estarán acompañadas de precipitaciones.

A medida que avance el día, se prevé un aumento de la cobertura nubosa, lo que generará lluvias y lloviznas dispersas en varias regiones. Los estados más afectados durante la tarde serán Delta Amacuro, Guayana Esequiba, el este de Sucre, noreste de Falcón, sur de Bolívar, Amazonas, Mérida y el sur del Lago de Maracaibo.

La jornada estará influenciada por una perturbación en los niveles bajos de la troposfera y los efectos convectivos locales, que son los responsables de la formación de estos fenómenos meteorológicos.

Se recomienda a la población estar alerta ante posibles precipitaciones y, en especial, en las zonas más vulnerables a lluvias fuertes.

Inameh destaca presencia del polvo del Sahara

El organismo también informó que a partir de este miércoles 29 de enero y hasta el domingo 2 de febrero se espera la llegada de polvo del Sahara al territorio nacional.

Estas partículas que provienen del desierto africano afectan la visibilidad horizontal, disminuye la formación de nubes y también puede ocasionar algunas alergias en personas sensibles o con afectaciones respiratorias.

El polvo del Sahara está compuesto principalmente por pequeños fragmentos minerales. Son ricos en hierro y fósforo, nutrientes que necesitan algunas plantas terrestres y el fitoplancton para crecer. Cuando las partículas caen sobre la superficie del océano, pueden funcionar como fertilizantes para las criaturas fotosintetizadoras, según reseña National Geographic