Para solicitar que se les extienda el tiempo de exposición solar, el ingreso de paquetería, las visitas de hijos y hermanos menores de edad, entre otros, familiares de detenidos por las protestas postelectorales manifestaron al mediodía de este viernes, 18 de octubre, frente a la sede del Ministerio de Servicio Penitenciario en El Rosal.
Denunciaron que, transcurridos tres meses de las detenciones, los acusados de participar en las protestas para mostrar su descontento por los resultados electorales del #28J, siguen aislados, sin una adecuada alimentación ni posibilidad de un abrazo de sus seres queridos, lo que representa una violación a sus derechos humanos.
La reunión de los familiares a las afueras del ministerio estaba pautada para las 10:00 a.m., pero funcionarios de seguridad se acercaron en varias oportunidades para instarlos a pasar y formalizar sus denuncias. Les aseguraron que recibieron órdenes de no permitirles la protesta; sin embargo, pasadas las 11:30 a.m. un nutrido grupo alzó su voz. Varias patrullas del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) se instalaron a su alrededor.
Los denunciantes firmaron una carta dirigida al ministro Julio García, en la que expusieron que gran parte de los acusados no han tenido acceso a una correcta alimentación ni a los artículos personales y se ha imposibilitado el contacto físico con sus seres queridos.
Tamara Suju denuncia que presos políticos en Tocorón pasan días sin comer
Parientes compararon el trato que reciben presos políticos en las cárceles Tocuyito y Tocorón con el de presos comunes y precisan que estos sí reciben paquetería e ingreso de ropa y artículos de aseo personal; sus visitas son en la misma sala, no a través de un vidrio.
Varios de los familiares denunciaron que a los detenidos les dieron uniformes, zapatos y colchonetas cuando estaban en centros de detención preventiva, pero al ser trasladados a los centros penitenciarios, se les impidió el acceso de estos artículos.
Detallaron que los policías no les respondieron por los enseres, les indicaron que se perdieron y debían comprarlos otra vez.
Entre las exigencias que hicieron familiares en el documento entregado destacan:
- Ampliación de tiempo de exposición al sol en los patios de centros penitenciarios.
- Ingreso de paquetería con medicamentos, insumos personales y alimentación complementaria.
- El mismo régimen de visitas que el resto de los privados de libertad y contacto con sus parientes.
- Revisión por parte de especialistas médicos.
- Que se les permita cocinar sus alimentos junto a personal de las prisiones que se dedica a ello, esto como forma de colaborar.
- Inclusión en actividades deportivas y culturales, también que se les permita el ingreso de libros y juegos de mesa.
- La organización de visitas especiales para que puedan compartir con sus hijos y hermanos menores de edad.