Boleta electoral para el 27 de julio refleja intervenciones de partidos, ausencias y “descalabro” opositor que participa 
36 organizaciones políticas que participaron el 25 de mayo, repiten el 27 de julio

Este jueves 19 de junio, un día después del previsto en el cronograma aprobado, el Consejo Nacional Electoral (CNE) realizó el acto de escogencia de la posición de las tarjetas electorales en la boleta de votación electrónica que se empleará para los comicios municipales del 27 de julio. 

El tarjetón, con el que se escogerán 335 alcaldes y más de 2.000 concejales en todo el país, refleja, al igual que los comicios del 25 de mayo, un ecosistema de organizaciones políticas intervenidas (del lado del chavismo y de la oposición).

Asimismo, ausencias de tarjetas que una vez más tocaron la puerta para participar, pero se la cerraron, y ciertos movimientos de factores opositores que resultaron seriamente afectados por la abstención en las votaciones para gobernadores, diputados regionales y a la Asamblea Nacional (AN). 

Los movimientos de FV, UNT y Única 

“Es evidente que Fuerza Vecinal (FV) queda mejor ubicado para estas elecciones que el 25 de mayo. Es mucho más sencillo ubicar esa tarjeta en una esquina inferior que donde estaba antes y se rompe la teórica unidad, por lo menos visual, que había entre Un Nuevo Tiempo (UNT) y Unión y Cambio. Quedaron separados, desperdigados, después del descalabro del llamado a participar anterior”, sostuvo el director de Votoscopio, Eugenio Martínez. 

A juicio del periodista especializado en el tema electoral, todo indica hasta ahora que los esfuerzos hechos por UNT y Única para promover el voto durante las parlamentarias y regionales no se van a replicar para las municipales, por lo que el reto será para los liderazgos locales que participan. En los comicios del 25 de mayo, de 24 gobernaciones, la oposición que participó sólo retuvo una, la de Cojedes.

“Que UNT y Única no vayan juntas para las municipales en el tarjetón creo que responde a la misma razón por la cual (Henrique) Capriles no ha llamado  a votar hasta ahora el 27 de julio y puede ser el reconocimiento del peligro de participar en comicios sin condiciones, tal como lo hiciera el 25 de mayo”, opinó el politólogo Jesús Castellanos Vásquez.

El también experto electoral advirtió que el “aval y el silencio” en este tipo de eventos comiciales, sin condiciones, “allanan el camino a procesos electorales cada vez más autoritarios”. 

Única, de Capriles, pasó de la tercera posición en la primera columna para el 25 de mayo a ocupar la cuarta posición en la quinta columna para el 27 de julio. UNT, presidido por Manuel Rosales, pasó de la cuarta posición en la primera columna a la cuarta posición en la última columna. FV escogió la última casilla de la séptima y última columna con un rediseño de su tarjeta electoral en el que se eliminó el logo y solo se deja el nombre del partido. 

Única fue cuestionada por haber sido aprobada de manera “express” por el CNE para el 25 de mayo. 

Para las municipales participarán las mismas 36 organizaciones que postularon candidaturas el 25 de mayo. Las inscripciones por iniciativa propia y la conformación de grupos de electores resultaron nuevamente afectados para este proceso, por el poco tiempo para entregar los recaudos. 

El reino de las tarjetas judicializadas

“Nuevamente, la boleta electoral para el 27 de julio es un reflejo de la inexistencia de un real pluralismo en Venezuela. La enorme mayoría, casi totalidad de los postulantes son partidos judicializados o express. Es un ecosistema de partidos hecho a favor del actual régimen en Venezuela”, expresó Castellanos Vásquez. 

El Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), cuya tarjeta tuvo cambio de imagen desde las presidenciales, escogió su posición tradicional arriba y a la izquierda, favorecido por la votación del 25 de mayo, para la cual expertos estimaron una abstención superior a 70%.

Entre las organizaciones que lo acompañan en el Gran Polo Patriótico Futuro, Enamórate, Partido Verde, ORA, UPV, también cambiaron de posición en la boleta, aunque siguen en la parte superior.

La coalición chavista sigue caracterizada porque de 13 tarjetas, cinco son judicializadas y al menos cuatro “exprés”. Por orden del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), entre 2020 y 2023, las tarjetas del Partido Comunista de Venezuela (PCV), Tupamaro y Patria Para Todos (PPT), quedaron bajo el control de dirigentes afines a la administración de Nicolás Maduro.

El Movimiento Electoral del Pueblo (MEP) fue intervenido desde 2015 y Podemos desde 2012. Los Partidos Verde y Futuro, vinculados a Héctor Rodríguez, están en el tarjetón desde el 28 de julio de 2024, aprobados de manera “exprés” por el CNE para postular la candidatura de Maduro. También Enamórate, de José Antonio España, exdirigente del Movimiento al Socialismo (MAS) y de Primero Justicia (PJ). 

Otro bloque de 13 tarjetas corresponde a la llamada Alianza Democrática con representación en la AN. En muchos municipios van en alianza con UNT y Única, además de otras organizaciones que decidieron unirse para preservar 122 alcaldías ganadas en 2021.

De este grupo, cuatro organizaciones fueron intervenidas por el TSJ entre 2015 y  2020. Es el de Acción Democrática (AD), de Copei, PJ bajo el control del parlamentario José Brito y Voluntad Popular (VP) en poder del excandidato presidencial, Daniel Ceballos. Al exalcalde de San Cristóbal le avalaron de manera exprés la organización Arepa Digital para el 28 de julio de 2024. La tarjeta de Bandera Roja también fue confiscada en 2015.

La Alianza Democrática también inscribe candidatos para el 27 de julio, en algunos municipios, con las tarjetas de El Cambio, Avanzada Progresista, Unidad Visión Venezuela, Cambiemos, Movimiento Republicano y Venezuela Unida, del diputado Luis Parra. 

Las tarjetas que siguen ausentes 

Otra modificación en la boleta electoral fue hecha por CONDE (Confederación Nacional Democrática) que cambió su nombre a Partido de la Reconciliación Nacional (PRN), a raíz de la separación del excandidato presidencial y a la Gobernación de Anzoátegui, Benjamin Rausseo. El 30 de mayo, el comediante y empresario anunció en sus redes sociales que se tomará una pausa del trabajo político -decepcionado de tantos ataques, según dijo- para dedicarse a seguir creando fuentes de trabajo dentro del país.

Organizaciones como Centrados, MAS, Movimiento por Venezuela (MPV) Puente y Unión y Progreso han insistido ante el CNE para que rehabilite sus tarjetas, pero al igual que el 25 de mayo quedaron fuera de la posibilidad de postular candidaturas, a pesar de que insisten en llamar a votar pese a lo ocurrido el 28 de julio de 2024.

Desde el MAS se ha señalado que las razones del CNE para mantenerlas fuera de la carrera electoral son políticas, no legales. En el caso de la tolda naranja, participó hasta las elecciones regionales y municipales del 2021, pero fue anulada para las presidenciales en las que llamó a votar por Edmundo González. MPV inscribió la candidatura presidencial del exdiplomático en 2024, pero fue anulada para el 25 de mayo. 

A Centrados no solo le anularon la tarjeta para los comicios regionales y parlamentarios, sino que su candidato presidencial de 2024, Enrique Márquez, permanece detenido e incomunicado desde enero de 2025, señalado de supuestamente conspirar contra la administración de Maduro.

Las organizaciones de izquierda disidentes del chavismo no cuentan con ninguna tarjeta para postular candidatos luego de la intervención del PCV, aunque han querido participar, entre ellas Izquierda Venezuela, de Félix Velásquez, que no aparece en la boleta electoral desde las regionales de 2021.

“Los procesos electorales cambiaron” 

Vásquez y Martínez coinciden que lo ocurrido el 28 de julio, cuando el CNE anunció como ganador a Maduro sin mostrar evidencias, marcan un antes y un después en los procesos electorales en Venezuela. 

“Después del 28 de julio en Venezuela se instaura un nuevo esquema de los procesos electorales. De un autoritarismo con grandes déficits competitivos se pasa a un autoritarismo cerrado, en el que la voluntad popular, el voto ciudadano y el pluralismo político se violentan gravemente. Eso fue el 25 de mayo y es el 27 de julio”, recalcó el politólogo. 

Recordó que el CNE sigue sin publicar los resultados desglosados del 28 de julio y el 25 de mayo, en las que adjudicó escaños en la AN a favor de la oposición sin contar con la votación suficiente. Ahora, añade, organiza unas elecciones municipales con escasos meses de antelación, sin Registro Electoral (RE) debidamente actualizado y en medio de una alta desconfianza ciudadana.

“Si el proceso del 25 de mayo fue prácticamente clandestino en su organización por parte del CNE, las del 27 de julio son peores en la medida en que no hay tiempo real para hacer auditorías al sistema automatizado si fuera una prioridad de los partidos participantes, que no lo es. El hecho de que la convocatoria de la elección coincidiera con el cierre del RE, da cuenta de lo improvisado y atropellado de este proceso”, añadió Martínez.

Acotó que no es poca cosa que el 27 de julio también se haga una consulta de proyectos comunitarios presentados por la juventud, en la que podrán sufragar mayores de 15 años, en el sentido del interés de Miraflores de avanzar en un modelo de “democracia comunal”, con una división político territorial distinta y no establecida en la Constitución, más allá de las elecciones convencionales.