El coordinador general de la ONG Provea, Oscar Murillo, exigió a Estados Unidos respetar los derechos de cientos de venezolanos y se investigue de forma exhaustiva antes de aplicar la Ley del Enemigo Extranjero que invocó Donald Trump para enviar a 238 connacionales, a los que acusa de ser miembros del Tren de Aragua, a una cárcel de máxima seguridad en El Salvador.
Ese grupo llegó al país centroamericano después de que en una visita a ese país, el presidente salvadoreño Nayik Bukele ofreció al secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, alquilar su cárcel CECOT para mantener prisioneros a migrantes sin papeles que entraron a territorio estadounidense.
«En virtud del Principio de No Devolución, exigimos que los derechos de cientos de miles de venezolanos que residen en los EEUU sean garantizados y que haya una exhaustiva investigación previa a la implementación de la Ley de Enemigos Extranjeros para evitar injusticias y abusos de poder», dijo Murillo este domingo 16 de marzo en su cuenta de la red social X.
Trump envía más de 200 venezolanos a El Salvador
Más temprano, Bukele mostró imágenes y videos de la llegada de los venezolanos a su país y cómo los sacaban a la fuerza de varios aviones. Eran hombres que iban esposados bajo fuertes medidas de seguridad.
Trump se pasó por alto la orden de un juez federal que el sábado decidió de forma temporal impedir el traslado de migrantes venezolanos, al menos cinco, al invocar esta ley estadounidense que data del año 1798 y que se usó en ese país solo en momentos de conflictos internos.
Murillo recordó que la migración forzada de millones de venezolanos fue consecuencia del «modelo abiertamente autoritario que encabeza Maduro» al que responsabilizó de expulsar «a los nuestros a causa de erráticas políticas que destruyeron la economía. De esto no cabe duda».
Los ataques de Trump a migrantes venezolanos
Desde su llegada a la Casa Blanca, el mandatario republicano inició su política de deportación masiva de migrantes, pero se ha cebado con los venezolanos. Primero al enviar a un centenar a la cárcel de Guantánamo, en Cuba, después con la eliminación de la extensión del Estatuto de Protección Temporal (TPS) que beneficiaba a unos 300 mil connacionales en ese país y ahora al invocar la Ley del Enemigo Extranjero, como denominó ahora a la banda criminal El Tren de Aragua.
Aunque logró un acuerdo con el chavismo para los vuelos de deportación y en los dos primeros que se hicieron, el gobierno de Trump dijo que algunos migrantes eran miembros del grupo, en Venezuela el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, descartó algún nexo de esos migrantes con la banda que nació en la cárcel de Tocorón.
Además, familiares de algunos que enviaron a Guantánamo también denunciaron que sus allegados no tenían vinculación con el grupo que se expandió por varios países de Suramérica e incluso llegó a EEUU, donde Trumpo los denominó, junto a los carteles de la droga mexicanos, como organizaciones terroristas.