La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) informó que el papa Francisco, en medio de su convalencia en el hospital Gemelli de Roma, nombró al obispo de Cabimas, monseñor Ángel Caraballo, como el nuevo arzobispo de Cumaná, sede que estaba vacante desde que monseñor Jesús González de Zárate fue cambiado a la Arquidiócesis de Valencia.
En el sitio web de la institución se resalta que Caraballo nació en Puerto Ordaz, estado Bolívar, el 30 de mayo de 1965. Su formación la comenzó con Filosofía en el Seminario de Barquisimeto (Lara), mientras que cursó la Teología en España, específicamente en el Colegio Eclesiástico Internacional del Bidasoa. Además, obtuvo un título como bachiller en Teología por la Universidad de Navarra, en el mismo país europeo.
Tiene una licenciatura en Derecho Canónico. Su labor sacerdotal la comenzó como párroco, profesor del Seminario Mayor, Canciller de la Curia y Vicario General de la Diócesis de Ciudad Guayana.
Desde el año 2012 lo nombraron obispo auxiliar de la arquidiócesis de Maracaibo y lo ordenaron el 16 de febrero de 2013. Mientras que en 2019 lo designaron obispo de Cabimas, también en el estado Zulia.
«En la Conferencia Episcopal de Venezuela, Caraballo es presidente de la Comisión episcopal de cultura del buen trato, salvaguarda y prevención, y miembro de la Comisión Episcopal para las Circunscripciones Eclesiásticas. Los invitamos a orar por los frutos pastorales que traerá Mons. Caraballo para la Iglesia de Cumaná», dijo la CEV sobre este nombramiento.
Cambios papales en Venezuela
Los últimos cambios que hizo el papa Francisco en Venezuela datan de junio del año pasado. En ese momento designó a Jesús González de Zárate como arzobispo de Valencia; al que fue obispo de La Guaira, Raúl Biord Castillo, como arzobispo de Caracas y a Polito Rodríguez Méndez, que era obispo de San Carlos, como arzobispo de Barquisimeto.
Además, en octubre del año pasado nombró a Lisandro Alirio Rivas Durán como obispo de San Cristóbal, quien asumió el cargo tras la renuncia de monseñor María Moronta, quien cumplió 75 años de edad y según el Derecho Canónico debe presentar su renuncia al llegar a esa edad.