La futbolista venezolana Deyna Castellanos, de las Portland Thorns de la NWSL, explicó que no ha acudido a la última convocatoria de la selección de su país, la Vinotinto femenina, por miedo a no poder regresar a Estados Unidos dentro del nuevo contexto político y migratorio bajo la Presidencia de Donald Trump.
«No sé cuándo será seguro para mí viajar», dijo a los medios la exjugadora del Atlético de Madrid, equipo con el que conquistó la Supercopa de España, y del Manchester City de Inglaterra.
«La situación política aquí y en Venezuela es muy complicada. Yo tengo una responsabilidad aquí. Obviamente estoy bajo contrato y la incertidumbre de que puedo ir a casa pero no saber si puedo volver es algo que da mucho miedo, no sólo para mí, sino para más jugadoras de la liga. Fue muy triste que no pudiera ir con la selección nacional, pero creo que fue la decisión correcta quedarme y seguir entrenando y creciendo aquí. Pero principalmente ser capaz de quedarme y de seguir jugando en Estados Unidos», añadió.
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Por falta de claridad, Castellanos no viajó
El agente de la futbolista, según detalló la semana pasada la cadena ESPN, indicó que la ausencia de Castellanos con la Vinotinto se debió a «la falta de claridad» en cuanto a las restricciones para entrar en Estados Unidos.
Una situación similar sufrieron cuatro jugadoras de Zambia, que tampoco viajaron con su selección para evitar problemas en su retorno al país norteamericano.
Las políticas migratorias de Donald Trump, tras su regreso a la Casa Blanca, ha tenido especial hincapié en la población venezolana, hasta el punto que declaró como organización terrorista a la banda criminal Tren de Aragua, a la cual acusó de promover una invasión en EEUU y le sirvió de excusa para deportar, el pasado 15 de marzo, a 238 venezolanos a una cárcel de máxima seguridad de El Salvador.
Además, a partir de este viernes 11 de abril los extranjeros que viven en EEUU deberán registrarse y colocar sus huellas dactilares en un sistema que anunció Trump el mismo día que volvió a la Casa Blanca.
Entre los requisitos, ahora los migrantes deberán portar consigo el comprobante de registro porque no tenerlo puede conllevar a detenciones, multas, la cárcel y hasta deportaciones.