Caracas.- La Corporación de Salud del estado Táchira (Corposalud) anunció la implementación de medidas preventivas para evitar la propagación de la fiebre amarilla en el país, entre las que destaca la exigencia de la vacunación contra esta enfermedad en los pasos fronterizos con Colombia.
La medida entró en vigencia este miércoles 4 de junio, cuando comenzó a ser obligatorio la presentación del carnet de vacunación contra esta enfermedad para entrar al país. Las autoridades sanitarias acotaron que, aunque la vacuna no está contraindicada, quedan exentos los pacientes inmunosuprimidos o con enfermedades inmunológicas, quienes deben presentar informe médico.
Esta decisión responde al aumento de casos reportados en países vecinos como Colombia, Ecuador y Bolivia, en los que la fiebre amarilla fue declarada una emergencia sanitaria, reseñó el medio Infobae.
De acuerdo con el director de Epidemiología de Corposalud Táchira, Reggi Barrera, aunque no se han registrado casos de fiebre amarilla en Venezuela, las autoridades consideran necesario tomar medidas preventivas debido a la proximidad geográfica con regiones afectadas.
Barrera recordó que esta enfermedad viral hemorrágica, transmitida por mosquitos, es endémica en áreas tropicales de América Central y del Sur, y puede provocar síntomas como fiebre, dolores musculares y de cabeza, náuseas, y en casos graves, insuficiencia renal, hemorragias y muerte.
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Vigilancia epidemiológico en Táchira
Los representantes de la Corposalud Táchira señalaron que mantendrán la vigilancia epidemiológica en la entidad para la detección oportuna de casos y hacer el cerco correspondiente, con el fin de evitar la proliferación de la fiebre amarilla en el estado.
Reggie Barrera, jefe de Epidemiología de la Corposalud, en representación de la autoridad única de salud, Rafael Medina, destacó que en los próximos días se comenzará a vacunar a los adultos mayores de 60 años solo en los municipios García de Hevia, Ayacucho, Bolívar, Pedro María Ureña y Rafael Urdaneta, que comparten frontera con el Departamento Norte de Santander en Colombia, donde serán distribuidas 14.600 vacunas.
Barrera dijo que el objetivo es «proteger a toda la colectividad de la fiebre amarilla como una enfermedad que puede enfrentar el país, porque estamos rodeados de esta enfermedad en los países con los que compartimos frontera».
Explicó que se espera en las próximas semanas que los municipios fronterizos tengan toda la población inmunizada. En el resto del estado se mantendrán las vacunaciones a personas de entre 1 y 59 años.
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