Caracas.- Los presos políticos que están recluidos en el Centro Penitenciario de Tocorón, en el estado Aragua, están siendo obligados a participar en actividades religiosas de la fe evangélica. Así lo alertó el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), luego de recibir la denuncia por parte de familiares de los privados de libertad.
En opinión de esta organización no gubernamental, las autoridades penitenciarias están vulnerando el derecho a la libertad de culto de los detenidos, quienes, además, corren el riesgo de ser castigados, si se niegan a participar en las liturgias.
“La imposición de una religión dentro de un centro penitenciario atenta contra la libertad de pensamiento y de conciencia, principios fundamentales que son reconocidos tanto en nuestra Constitución como en tratados internacionales de derechos humanos", destacó la ONG, a través de una nota de prensa.
Uno de los hechos que sustenta la denuncia de los familiares de los privados de libertad ocurrió el 31 de diciembre de 2024. Ese día, los presos fueron obligados a escuchar música cristiana durante horas sin interrupción.
Familiares denuncian que a presos políticos de Tocorón les dan ansiolíticos y comida con picante
“De acuerdo con fuentes cercanas a la situación, aquellos que expresaron su negativa a participar en estas actividades religiosas fueron amenazados con represalias, que podrían incluir restricciones en visitas, aislamiento o tratos degradantes por parte de las autoridades penitenciarias", señala la nota de prensa del OVP.
La oenegé menciona que, según el testimonio de los familiares, el director del penal, quien presuntamente es muy cercano al ministro para el Servicio Penitenciario y, además, profesa la religión evangélica, habría llegado a un acuerdo para promover la evangelización dentro de esta cárcel.
Al respecto Humberto Prado, director del Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), destacó que estas denuncias refuerzan la preocupación sobre la falta de garantías y el deterioro de los derechos fundamentales dentro del sistema penitenciario venezolano.
«Lo que está ocurriendo en esta cárcel es una violación flagrante de los derechos humanos y de la libertad de culto. No se puede obligar a nadie a adoptar una creencia bajo presión, menos aún cuando están en una situación de total vulnerabilidad. Es el colmo que el régimen no solo los mantiene detenidos en condiciones inhumanas, sino que ahora también pretende imponerles una doctrina religiosa, negándoles su derecho a decidir sobre sus propias creencias», agregó Prado.
Según la oenegé venezolana Foro Penal, 1.196 personas permanecían detenidas por motivos políticos hasta el 3 de febrero, 405 menos que hace dos semanas. La mayoría de estos ciudadanos fueron arrestados luego de las presidenciales del 28 de julio de 2024.
A través de la red social X, la ONG señaló que, del total de detenidos, 1.080 son hombres y 116 son mujeres, Cuatro de los privados de libertad son adolescentes, con edades entre 14 y 17 años de edad.