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Maracaibo.- Ya se cumplen 311 años de la renovación milagrosa en honor a la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, la patrona de los zulianos, y, en esta oportunidad, por la pandemia por el COVID-19 solo se hará una celebración de la eucaristía a las 8.00 de la mañana con la presencia de 160 personas y a puerta cerrada.
La pandemia por el coronavirus hizo que por medidas de bioseguridad se prohibiera la visita de los feligreses al templo, pero quienes tienen promesas que cumplir ante la Chinita lo han hecho a través de donaciones de medicinas e insumos para pacientes con COVID-19.
La eucaristía solemne de este 18 de noviembre la presidirá el arzobispo de Maracaibo y presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor José Luis Azuaje, y al finalizar la celebración, la santa reliquia de la Chinita recorrerá las calles de los municipios Maracaibo y San Francisco en el María Móvil.
El párroco de la Basílica, Nedward Andrade, dijo que los devotos podrán llevar sus promesas ante cualquier imagen o estampa de la Virgen Chinita que esté en los hogares y recordó que el lema de este año es: Chiquinquirá, cuida con afecto maternal a este mundo herido.
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Sobre las donaciones de insumos médicos y medicinas, el coordinador de las fiestas patronales y Servidor de María, Ángel Rivas, dijo: “Se han recibido medicamentos, insumos médicos para tratar a enfermos de la pandemia. Los han traído cuando se abre la Basílica para la eucaristía y este domingo 15 de noviembre, día de la primera visita de la gente a la Virgen, trajeron muchos".
Le pide a los feligreses que sigan colaborando y anunció que la semana que viene el templo se abrirá todos los días, desde las 4.00 pm hasta las 6.00 pm. “Aparte de la labor social es apoyar y honrar sus promesas ayudando a los que necesitan y padecen por el COVID-19".
Los insumos serán entregados a los hospitales centinela del estado Zulia.
