Caracas.- “Hay que estudiar, hay que estudiar, el que no estudia se parece a Nicolás”, una mujer grita frente al Ministerio de Educación y, por el gesto de su cara, pareciera que regaña a alguien. Junto a ella, una multitud vociferaba la consigna y exigía la destitución del ministro Aristóbulo Istúriz.
Este lunes, 16 de septiembre, comenzó el año escolar 2019-2020 con una reducción en el alumnado de 30% estimada por la Unidad Democrática del Sector Educativo (Udse), frente al incremento de 7,27%, que se traduce en 8.244.053 de estudiantes que, según Istúriz, regresarían a las aulas de los 27.000 planteles del país. Sin embargo, el período inició con una protesta del gremio en varios estados de Venezuela y en Caracas. La cuadra completa en la que se ubica el ministerio se llenó de profesores de educación básica y media que afirmaron: “La clase es en la calle”.
Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro Foto: Francisco Touceiro
La primera protesta del nuevo año escolar se vio empañada por la agresión de funcionarios de la Guardia Nacional, quienes instalaron cinco piquetes entre el Ministerio de Educación y la avenida Urdaneta. La multitud logró derribar al menos tres y esquivar los demás. Hubo forcejeos entre algunos efectivos y varios manifestantes; pero la caminata logró avanzar.
En la avenida, una cuadra entera, entre las calles que bordean la Plaza Bolívar del centro de Caracas, estuvo cerrada durante al menos media hora. Daniela Viña, profesora de biología, llegó desde Carúpano, estado Sucre, para expresarse a favor del respeto por la profesión docente. “Después de 11 años de servicio, me suspendieron el pago por mi trabajo por pensar diferente, por luchar”, aseguró e insistió que tiene casi 300 días protestando. “Me duele lo que estamos viviendo. Los que seguimos acá somos unos guerreros”, dijo.

Uno de los reclamos del gremio es que se cumpla el contrato colectivo que establece la homologación de los salarios de acuerdo con el desempeño académico y la experiencia profesional de cada docente. Por ejemplo, un educador de categoría seis, que corresponde a quien ha realizado estudios de postgrado y doctorado, devenga un salario que no supera los cuatro dólares.
Como Antonio Terán, que se queja porque luego de 25 años de servicio no puede comprarse unos zapatos. Es profesor de historia y geografía y no quiere volver a los salones de clases hasta que el ministro no atienda a sus demandas.

Algunos estudiantes universitarios acompañaron la protesta. Andrea Dávila, de Comunicación Social de la Universidad Monteávila, aseguró que apoya la movilización porque la educación es un asunto que compete a todos los sectores y sociedad civil: “También nos vemos afectados por la crisis, el déficit de docentes, la baja en la calidad de la educación. La idea es estar unidos porque es un problema de todos”.

Luego de dos horas de concentración, cuando los docentes intentaron volver a la sede del ministerio, un grupo de civiles armados que pasaron en motos dispararon al aire e intentaron disolver la protesta. Sin embargo, los docentes siguieron adelante. Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana se mostraron indiferentes ante la denuncia de la multitud que les reclamaba por permitir el amedrentamiento. No hubo heridos.
LEE TAMBIÉN:
Una vez frente al Ministerio de Educación, un grupo de militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela se acercó para gritar groserías y amenazas a los docentes. Ni la espera bajo el sol, las agresiones de la Guardia Nacional ni la intimidación de los civiles armados detuvo la movilización de los docentes, que se niegan a volver a las instituciones educativas hasta que el gobierno de Nicolás Maduro atienda a sus reclamos.
DÉJANOS TU COMENTARIO