Sebastián Filoramo es un niño ciego que vive en Barquisimeto y gracias al apoyo de sus padres ha logrado hazañas que parecen imposibles para una persona con discapacidad visual total: desde manejar bicicleta y monopatín, hasta adaptar el álbum Panini del Mundial Qatar 2022 al método braille, para poder disfrutar de la fiebre del fútbol