El candidato designado por unanimidad por la Plataforma Unitaria no se parece en nada a lo que hemos visto en política durante el último cuarto de siglo. Ecuánime y pausado, la primera comunicación oficial de Edmundo González Urrutia recuerda que el retorno a la normalidad es posible.
Por: Leonor Suárez
En Venezuela pasan cosas muy extrañas. Como decía Oscar Yánez: en un país donde las cucarachas vuelan, cualquier cosa se puede esperar.
Y así como el revolotear de unas alas, la fuerza ha dado paso a la diplomacia. Con la inhabilitación administrativa de María Corina Machado y luego el bloqueo de facto de su sucesora designada, la académica Corina Yoris, el gobierno ha forzado la mano de la oposición. El resultado es quizás tan inesperado como auspicioso.

El candidato designado por unanimidad por la Plataforma Unitaria no se parece en nada a lo que hemos visto en política durante el último cuarto de siglo. Ecuánime y pausado, la primera comunicación oficial de Edmundo González Urrutia recuerda que el retorno a la normalidad es posible. Aquí las claves en su discurso que así lo revelan.
El lenguaje
“Venezolanos", fue la primera palabra que pronunció el exembajador González que se sintió como un llamado de atención. Inició así la breve, brevísima, primera comunicación oficial del candidato de la oposición para las elecciones del 28-J.
El tono me recordó a la forma en la que los presidentes se dirigían al país cuando estaba creciendo en Caracas, antes de emigrar, durante los años noventa o a las alocuciones más formales de otros países en los que se ve a un jefe de Estado dirigirse a una audiencia que estima y respeta.
Edmundo, a pesar de los jingles y los memes, se muestra calmado, sin pasiones. Normal. Le habló al ciudadano, no a términos ideologizados como “pueblo mismo" o “compatriotas" o “camaradas". La invocación de la nacionalidad incluyó así a todos a todos, absolutamente a todos.
El atuendo y otros artefactos
Vestido de saco y corbata en tonos azules y de apariencia impoluta, almidonada, dio la impresión de que se trataba de una cita de alto nivel. Teníamos años sin ver a un candidato presidencial en sus alocuciones vestido de Presidente. Como buen diplomático, González Urrutia entiende que las formas hablan, y mucho.
A pesar de que parece que el traje es el atuendo habitual de este veterano, el de este miércoles tenía especial detalle y atención. Así, esta semana pasamos de las franelas al saco y corbata. Da gusto ver a un funcionario vestido para la ocasión.
Una pluma Mont Blanc descansaba perpendicular al borde de la mesa. Perfectamente alineada, lista para firmar un documento importante, símbolo tal vez de cómo Edmundo González subscribe cada una de sus palabras. Y un pañuelo blanquísimo reposaba al alcance de la mano, por si fuese necesario, aunque no.
Este gentleman criollo, un hombre hecho en la democracia venezolana, se manejó con la calma que solo ofrecen la edad o de la preparación. En su caso, ambos. Él mismo ha admitido que su familia no era de fortuna y que fue la educación pública venezolana –primaria y secundaria– la que le permitió acceder a una carrera que su padre decía “era de gente rica".
Denota González en su persona y sus maneras la posibilidad de movilidad social que llegó a existir en el país, como un recordatorio de lo posible.
El contenido
Todo lo que empaquetó en apenas 4 minutos y 15 segundos Edmundo González Urrutia de manera sosegada y directa revela su preparación. No fue el traje lo único que cuidó y manejó de manera fina y contundente, también sus palabras.
En menos de cinco minutos pintó la complicada situación del país (inflación, infraestructura decadente, servicios públicos quebrados, desigualdad, migración, injusticia), y una estrategia: democracia.
De repente una palabra se materializó en el aire como una posibilidad: transición. El exembajador ensayó pues, escribió su mensaje y lo estructuró. Algo que se extraña. Terminó con una frase que no necesitó un toque de diana: “Es la hora de la unión de todos los venezolanos"
LEONOR CAROLINA SUÁREZ / X: @LeonorSuarez / Instagram: leocarosuarez
Estratega de contenidos, escritora y guionista radicada en EE UU. Licenciada Cum Laude en Derecho de la UCAB y máster en Comunicaciones de University of Florida. Cuenta con más de diez años de experiencia en periodismo digital y producción audiovisual. Fun fact: participó en Miss Venezuela 2004