La Corte Suprema de Estados Unidos decidió este lunes 19 de mayo que el presidente Donald Trump puede terminar con el Estatus de Protección Temporal (TPS) para los inmigrantes de Venezuela. Esta decisión afectará a casi 350.000 venezolanos que viven en Estados Unidos.
El TPS para los venezolanos es el más grande que ofrece actualmente Estados Unidos y protege a unas 600.000 personas a través de dos designaciones separadas, una aprobada en 2021 y otra en 2023.
El programa de 2023 es el único que está en cuestión en el caso ante la Corte Suprema.
La orden del tribunal suspende de manera efectiva un fallo previo emitido por un juez federal en San Francisco.
Este fallo inicial había mantenido vigentes las protecciones del TPS que impedían la expulsión de los venezolanos.
Estas protecciones estarían vigentes hasta el 7 de abril de 2025, pero el juez Edward Chen ordenó una pausa, al considerar que la expiración amenazaba con interrumpir gravemente las vidas de cientos de miles de personas y podría costar miles de millones en actividad económica perdida.
Congresistas de Florida impulsan ley para restituir el TPS para venezolanos
Chen, quien fue nombrado para el tribunal por el presidente demócrata Barack Obama, determinó que el gobierno no había demostrado ningún daño causado por mantener el programa vigente.
No obstante, este lunes, el Tribunal Supremo aceptó la petición del actual gobierno de los EE. UU. de poner fin al TPS. Los magistrados no ofrecieron una justificación para aceptar la solicitud del gobierno, lo cual es común en apelaciones de emergencia.
Este programa de protección temporal fue implementado por el presidente Joe Biden. Sin embargo, cuando Donald Trump asumió la presidencia, en enero de 2025, anuló su extensión.
Esta nueva decisión de la Corte Suprema es un respaldo a la política migratoria del presidente Trump y sus planes de deportaciones masivas.