La policía allanó el martes, 14 de junio, el hotel donde se hospedan los tripulantes venezolanos e iraníes de un avión que permanece retenido en un aeropuerto de Buenos Aires. Así lo reseñó el Diario Las Américas
En la nota también se indica que la policía argentina retuvo varias de las pertenencias de la tripulación, en el marco de la pesquisa que busca determinar su identidad y el motivo de su arribo al país, en un Boeing 747 que aterrizó en el aeropuerto de Ezeiza el pasado 6 de junio.
En el operativo se incautaron teléfonos y aparatos electrónicos. Participó además el jefe del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Policía Federal Argentina (PFA), junto con unos 25 agentes. Fue ordenado por el juez federal Federico Villena, quien dispuso el secreto de sumario en la investigación para que de momento no tengan carácter público.
Imágenes difundidas por medios de prensa locales mostraron a la policía en el Hotel Plaza Canning, en las afueras de Buenos Aires, revisando los dormitorios de los tripulantes del vuelo que ha generado sospechas. Los funcionarios cargaban varias cajas, mientras miembros de la tripulación esperaban sentados en los pasillos del hotel.

Al explicar las medidas tomadas en torno al avión, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, dijo que luego de que aterrizó en Argentina el gobierno recibió información de organismos de inteligencia extranjeros. Advertían de la pertenencia de la tripulación iraní “a empresas relacionadas con la fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán, consideradas terroristas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos".