Caracas.- El Consejo Universitario de la Universidad Central de Venezuela (UCV) pide a la Administración de Nicolás Maduro la restitución de la Zona Rental Norte, territorio propiedad de la casa de estudios, así como el pleno restablecimiento de los derechos legales sobre el espacio.
En el acta del Consejo Universitario, con fecha del pasado 14 de mayo, las autoridades de la casa de estudios recuerdan que «las zonas rentales son propiedades inmobiliarias que el Estado ha entregado a la Universidad Central de Venezuela con el fin de que esta, a través de la Fundación Fondo Andrés Bello, las desarrolle y explote para el financiamiento de la actividad científica y el reforzamiento de su autonomía financiera».
Señalan que uno de los espacios de mayor relevancia es la Zona Rental Norte, ubicada entre Plaza Venezuela, la Gran Avenida, la avenida Oropeza Castillo y la autopista Francisco Fajardo, debido a su potencial económico. La superficie de esta área supera las diez hectáreas.
«Su origen se remonta a 1943, cuando el Ejecutivo compra la Hacienda Ibarra para la construcción, bajo la dirección arquitectónica de Carlos Raúl Villanueva, de la Ciudad Universitaria de Caracas. En 1974, el Gobierno Nacional crea la Fundación Fondo Andrés Bello y materializa la entrega a la UCV de la Zona Rental Norte con el fin de generar recursos para promover la investigación en todos los campos del conocimiento», apunta.
«La Zona Rental Norte es de la UCV», dijo, por su parte, la Asociación de Profesores de esta casa de estudios en su cuenta de X (antes Twitter), en un mensaje en el que agrega que acompaña la solicitud del Consejo Universitario.
Durante la sesión salvó el voto el profesor Lenín Sosa, representante principal del Ministerio de Educación Universitaria, según el acta.
El desarrollo de la Zona Rental
En el acta del Consejo Universitario, se explica que el Instituto de Urbanismo de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV diseñó un plan rector en 1987, en la búsqueda de rentabilizar el espacio. Una década después el proyecto se desarrolló, a cargo de la Fundación Fondo Andrés Bello, y fue ofrecido en licitación a los inversionistas nacionales y extranjeros.
«Pero este proceso se vio frustrado por el primer gobierno de Hugo Chávez y a partir de entonces se produjo la ocupación anarquizada de edificaciones inconclusas y otros espacios por instituciones gubernamentales y personas particulares», apunta.
Denuncia que en los últimos veinte años las autoridades universitarias y la Fundación Fondo Andrés Bello no han podido restablecer los derechos de propiedad que tiene la UCV sobre la Zona Rental Norte. «Un amplio espectro de agencias gubernamentales y poderosas intereses económicos presumiblemente vinculados al poder político se conducen como sus dueños promoviendo toda suerte de iniciativas en detrimento de único propietario legal que es la Universidad Central de Venezuela», agrega el texto.
En ese sentido señalan la construcción, en los últimos meses, de un terminal de autobuses publicitado por la alcaldesa de Libertador y de una estatua en una plazoleta que conmemora el 80 aniversario del triunfo de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
Para las autoridades universitarias, estas construcciones «constituyen dos manifestaciones de lo que no puede sino interpretarse como una voluntad permanente de despojar a la Universidad Central de Venezuela de bienes destinados a proveerla de recursos para su funcionamiento».