Caracas.- La alfombra roja del estreno de la película «Superman» se convirtió en el escenario ideal para que la actriz venezolana María Gabriela de Faría enviara un mensaje a la comunidad migrante en Estados Unidos, invitándolos a ser agentes de cambio y contribución en su nuevo hogar.
De Faría, quien se integra al universo DC interpretando a la villana Angela Spica, alias The Engineer, estableció un claro paralelismo entre el icónico Hombre de Acero y su propia experiencia personal.
Para la actriz, Superman encarna la esencia del migrante: una figura que, al dejar su planeta natal, dedica su existencia a mejorar y aportar a su nuevo hogar. Esta visión resuena profundamente con el compromiso que ella misma manifiesta tener con Estados Unidos.
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«Amo tanto a este país y siento que quiero mejorarlo y contribuir, y eso es exactamente lo que hace Superman. Él ama la humanidad de la misma manera que yo amo a este país», declaró la actriz, transmitiendo una conexión personal con el espíritu del superhéroe.
La venezolana no ocultó la inmensa emoción de verse proyectada en los gigantescos carteles publicitarios de la película. «Estoy como si no puedo creerlo. Estoy muy feliz», expresó, visiblemente conmovida por la magnitud de su logro.
Su dedicación al rol es palpable, pues la actriz decidió raparse el cabello para el personaje. «Soy actriz y me gusta hacer cosas diferentes», explicó, destacando su compromiso con la autenticidad artística.
El superhéroe de su vida
En un momento más personal, la actriz compartió quién es su «superhéroe» en la vida real: su esposo, el también actor venezolano Christian McGaffney. «Él me salva todos los días de mi vida», afirmó, subrayando el inmenso orgullo que toda su familia siente por sus logros en Hollywood.
La reacción en las redes sociales fue inmediata y masiva, con miles de venezolanos expresando su apoyo y orgullo. Mensajes como «Esa chama nos representa», «Qué grande María Gabriela» y «De Venezuela para el mundo» inundaron las plataformas, celebrando no solo el ascenso de la actriz en la industria cinematográfica internacional, sino también la profundidad y pertinencia de su mensaje.